El pasado fin de semana estuve recorriendo todos los caminos, senderos y veredas que me iba encontrando. Por fin después de preguntar a dos chavales me dijeron una ruta que ellos hacían algún fin de semana que otro. Salida en la picifactoría de el BOSQUE, es un sendero que bordea el cauce de un río. Al principio aquello me pareció alucinante, el camino no se veía, estaba todo lleno de hojas caídas y tenía que tener cuidado con los resvalones pues la rueda no se sujetaba demasiado bien. Los árboles los tenía que sortear ahora por en medio ahora por la izquierda ¡cuidado con la piedra!. Después de varios kilometros dí con la indicación que los chavales me habían comentado. Giré a la izquierda y aquí empezó lo bueno. Primero subidas suaves pero contantes había que echarle huevos, más tarde la cosa se empezó 
a complicar ritmo cardiaco a 160 p/m respiración profunda y bajar un poco el ritmo pues acababa de empezar y no sabía cuanto me quedaba. Pasando una finca, la subida se fue haciendo un poco larga pero logré estabilizar las pulsaciones y controlar la subida con la carencia, ritmo cardiaco y respiración. Sin darme cuenta empecé a dejar de sufrir y empecé a disfrutar con la subida que la verdad era un poco exigente. Al llegar a una de las curvas por fin ví el final de la rampa. Descansé bebí agua, bajé pulsaciones y me dispuse ha hacer la bajada donde me defiendo un poco mejor, el camino parecía seguro y deje que la bici bajara con mi incercia pero cuando mas agusto iba, empezaron los problemas. Correntines de agua cruzaban por el sendero y hacían que la conducción ya no fuera tan segura. La bajada que prometía subidón de adrenalina cada vez se fué complicando mas a causa de las lagunas que cuanto mas bajaba más numerosas eran. Tuve que echar mano de los frenos y dedicarme a derrapar para no cojer por encima de ninguna. El paisaje era total, rodeado de encinas alcornoques y cruzando por la sierra en dirección a SAHARA. Poco a poco me fui metiendo otra vez entre los árboles y el recorrido se fue suavizando hasta que dí con el cruce que tenía en mi chuleta. La pista que hasta entonces había sido de tierra ahora se convirtió en asfalto, poco después señal de 14 km para Sahara. Carretera asfaltada, 14km, me queda 30 minutos para llegar. Eso pensé. La realidad fue otra muy distinta, me encontré en un sube y baja que me empezó a cortar el ritmo y tube que cambiar de relación de carencia y la respiración. Cada vez que subía una cuesta notaba como las piernas empezaban a flaquear, así que empecé a hidra
tarme más a comer y reponer en la medida de lo posible las fuerzas que me quedaban. Aquel sube-baja no acababa nunca. Por fin después de 14 km interminables vi SAHARA . Pero todavía quedaba la última subida larrrgaaa, duurrra e interminable. Había llegado al cruce de la presa que une sahara, arrollomolinos y grazalema. DESAYUNO LARRGOOO POTENNNTEEE.
Para la vuelta tenía dos opociones, la primera llegar al cruce de Prado de Rey 18 km interminables de subidas y bajadas cortas, o la de volver cruzando la sierra por donde había venido. La verdad es que ninguna de ellas se me antojaban pués las piernas ya no me respondían como al principio.
a complicar ritmo cardiaco a 160 p/m respiración profunda y bajar un poco el ritmo pues acababa de empezar y no sabía cuanto me quedaba. Pasando una finca, la subida se fue haciendo un poco larga pero logré estabilizar las pulsaciones y controlar la subida con la carencia, ritmo cardiaco y respiración. Sin darme cuenta empecé a dejar de sufrir y empecé a disfrutar con la subida que la verdad era un poco exigente. Al llegar a una de las curvas por fin ví el final de la rampa. Descansé bebí agua, bajé pulsaciones y me dispuse ha hacer la bajada donde me defiendo un poco mejor, el camino parecía seguro y deje que la bici bajara con mi incercia pero cuando mas agusto iba, empezaron los problemas. Correntines de agua cruzaban por el sendero y hacían que la conducción ya no fuera tan segura. La bajada que prometía subidón de adrenalina cada vez se fué complicando mas a causa de las lagunas que cuanto mas bajaba más numerosas eran. Tuve que echar mano de los frenos y dedicarme a derrapar para no cojer por encima de ninguna. El paisaje era total, rodeado de encinas alcornoques y cruzando por la sierra en dirección a SAHARA. Poco a poco me fui metiendo otra vez entre los árboles y el recorrido se fue suavizando hasta que dí con el cruce que tenía en mi chuleta. La pista que hasta entonces había sido de tierra ahora se convirtió en asfalto, poco después señal de 14 km para Sahara. Carretera asfaltada, 14km, me queda 30 minutos para llegar. Eso pensé. La realidad fue otra muy distinta, me encontré en un sube y baja que me empezó a cortar el ritmo y tube que cambiar de relación de carencia y la respiración. Cada vez que subía una cuesta notaba como las piernas empezaban a flaquear, así que empecé a hidratarme más a comer y reponer en la medida de lo posible las fuerzas que me quedaban. Aquel sube-baja no acababa nunca. Por fin después de 14 km interminables vi SAHARA . Pero todavía quedaba la última subida larrrgaaa, duurrra e interminable. Había llegado al cruce de la presa que une sahara, arrollomolinos y grazalema. DESAYUNO LARRGOOO POTENNNTEEE.Opté por la carretera porque quería conocer otra alternativa por si venía algún día con el club al que pertenezco y además la carretera se me da un poco mejor que la tierra.
Eché mano de mi experiencia , me concentré en la carretera y empecé a pedalear con las pocas
fuerzas que me quedaban. Cuanto más km hacía mejor me iba encontrando en las subidas aunque el cansancio ya se hacía notar. Después de mucho luchar y echarle lo que hay que echarle para que la carretera
no te venza, llegué al cruce de Prado de Rey.
Ya sólo me quedaban 8 km hasta llegar al bosque y la mayoría de ellos en bajada.
Cuando ví la rotonda, cojí la primera a la izquierda dirección hotel las truchas lo rodeé y la carretera me llevó otra vez a la picifactoría donde comencé la ruta.
RUTA DE APROXIMADAMENTE 60 KM.
DIFICULTAD MEDIA-ALTA.
TIEMPO DE 4. A 4.5 HORAS
SALIDA A LAS 8.30 Y REGRESO A LAS 12.30 APROXIMADAMENTE.
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